Tradiciones

EL KAIKU 

El kaiku es un recipiente de madera de haya o abedul, realizado en una sola pieza, especialmente diseñado para facilitar el ordeño de cabras y ovejas. De forma cónica, tiene la boca más abierta que su base. Presenta la peculiaridad de tener el asa hacia adentro, lo que permite sujetarlo con una sola mano. 



El kaiku ha sido tradicionalmente utilizado por los pastores vascos para fabricar el queso y la cuajada o kallatua. 



Ya desde el Paleolítico, los pastores cocían la leche y el agua con piedras candentes que introducían en el interior de estos cuencos, todavía hoy fabricados por los artesanos de la montaña. 



LAS BODAS DE ENTONCES

Algo tan sencillo como la celebración del matrimonio resultaba hace un par de siglos toda una aventura. La tradición de la época requería unas condiciones inverosímiles hoy en día para aquellos que querían casarse, como por ejemplo los pobres que debían conseguir una "Sentencia Arbitraria de Amistad" de manos del escribano del pueblo, o los que tenían parentesco, a los que se les exigía pedir una "dispensa de consanguinidad" acudiendo a los viejos del lugar para obtener su confesión. 



Muchos, antes de contraer matrimonio, firmaban un escrito prematrimonial en el que se especificaba como iba a ser la boda; lo firmaban los padres y declaraban lo que cada uno aportaba al matrimonio. El ajuar de la novia y sus bienes pasaban automáticamente a nombre de su futuro marido e, incluso, cuando se dejaba la casa de uno de ellos, debía constar los terrenos y sus límites.



Peor lo tenían aquellos pillados in fraganti. Los padres de la joven debían acudir con un pariente, un par de jurados y el almirante del pueblo al lugar donde se encontraba la pareja. " Después de haver los saludado", ella "desnuda en carnes" y él "con solo una camisa", le metían a juicio al muchacho e iniciaban los trámites para la futura boda.